El Valle del Tiétar, comúnmente conocido como «La Andaluca de Vila», es una zona abulense de clima templado. Está situado al sur de la provincia de Ávila, limitando con Extremadura, Toledo y Madrid, y al sur de la Sierra de Gredos. El valle es un exuberante vergel con una flora y fauna diversas, con una altitud media de 400 metros sobre el nivel del mar. Su economía se basa en la agricultura, la industria manufacturera, la silvicultura y el turismo.
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ToggleHistoria
El Valle del Tiétar ha sido habitado desde la antigüedad. El territorio fue colonizado por los vettones, un pueblo celta que dejó su impronta en forma de esculturas zoomorfas conocidas como verracos.
Los vetones vivieron en la región hasta la llegada de los romanos, que acabaron adoptando su cultura. El territorio se dividió en señoríos durante la Edad Media. En la actualidad, las comunidades están divididas en mancomunidades que abarcan desde la cabecera del río Tiétar hasta las comarcas del centro y el oeste, conocidas como Alto Tiétar y Bajo Tiétar, respectivamente.
Situación Geográfica
El Valle del Tiétar está situado al sur de Castilla y León, en la provincia de Vila, al sur de la Cordillera Central, en la zona equivalente a la Sierra de Gredos. Su posición meridional y su moderada altitud contribuyen a un clima templado, numerosos arroyos y un entorno diverso.
Limita al norte con la Sierra de Gredos, al este con una estribación de la misma, al sur con el río Tiétar y al oeste con el desfiladero de Alardos.
Naturaleza
El Valle del Tiétar está densamente arbolado, con olivares, madroños, castaños, cerezos, higueras, pinos, e incluso naranjos.La fauna es diversa, con aves como el abejaruco y la cigüeña negra, así como reptiles y mamíferos.
Numerosos arroyos descienden desde las alturas de la Sierra de Gredos, generando gargantas y cascadas y sumándose a la extensa red hidrográfica de la comarca.
Pueblos
Si contamos los anejos pertenecientes al mismo municipio, son 30 los pueblos del Valle del Tiétar al sur de Gredos: Arenas de San Pedro (con Ramacastañas, La Parra y Hontanares), Candeleda (y El Raso), Piedralaves, La Adrada, Fresnedilla, Casavieja, Casillas, Santa María del Tiétar, Navahondilla, Sotillo de la Adrada…
- Arenas de San Pedro: Se encuentra en un valle protegido por montículos y el río Arenal.
- Candeleda: Situado en el sur de la Sierra de Gredos, cerca de La Vera.
- Piedralaves: Pueblo enclavado en una ladera poblada de pinos y olivares.
- La Adrada: Ubicada al pie de una colina con un castillo reconstruido recientemente.
- Fresnedilla: Sus orígenes datan de 1312.
- Casavieja: Situado en un bosque, con historia y arquitectura tradicional.
- Casillas: En un abrigo rodeado de montañas y arroyos.
- Santa María del Tiétar: Primer pueblo entrando desde Madrid.
- Navahondilla: Rodeado de bosques y castañares.
- Sotillo de la Adrada: Situado en una llanura cercana al río Tiétar.
- Pedro Bernardo: Conocido como el «Balcón del Tiétar». Fundado en el siglo XII.
- Gavilanes: Asentado en un bancal orientado de Este a Oeste.
- Lanzahita: Población antigua con una iglesia mencionada en 1250.
- San Esteban del Valle: Crecimiento rápido debido a la calidad del terreno.
- Guisando: Descripción como un pueblo blanco y tranquilo.
- La Iglesuela del Tiétar: Localidad vinculada a las comarcas de la Sierra de San Vicente y del Valle del Tiétar.
- Mombeltrán: Con historia señorial, destacando el castillo y la iglesia.
- El Arenal: Situado en el Parque Regional de la Sierra de Gredos.
- Cuevas del Valle: Ubicado en la parte alta de la falda y con un clima suave.
- Santa Cruz del Valle: Pueblo con casas de arquitectura tradicional y obras de arte en sus muros.
- Villarejo del Valle: Mantuvo lazos con Mombeltrán y tiene una agricultura de secano.
- Mijares: Iglesia construida en 1602 y diversas reparaciones a lo largo de los años.
- Poyales del Hoyo: Presenta un término municipal muy reducido.
- El Hornillo: Situado a orillas del río Cantos, rodeado de arboleda.
- Higuera de las Dueñas: Población de origen antiguo con lazos eclesiásticos.
¡Saludos! Soy Manuel, graduado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid. Desde hace más de una década, he tenido la suerte de llamar hogar a un hermoso pueblo de Ávila. Aquí, en medio de la tranquilidad y la belleza de este entorno, he encontrado mi fuente inagotable de inspiración.
Explorar los rincones pintorescos y los encantos escondidos del campo es mi pasión y mi misión. Cada sendero que recorro, cada pueblo que visito, tiene una historia que contar. A través de mis palabras y mis imágenes, aspiro a capturar la esencia de lo rural y transmitirla a todos ustedes.